miércoles, 22 de julio de 2009

Para una chica I

Pero una mañana al despertarme
tu mirada y tu rostro vi.
No aguante más y te seguí.
Mi corazón volvio a reir.
Ahora todo es diferente,
un camino y un destino compartido,
en el que hay una paz total,
y escucho una voz
que alienta mis sentimientos
y regala felicidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario